Al ver a los Grandes Maestros, uno percibe la grandeza de la Música en su máxima expresión, ¡ lo que puede hacer un ser humano moviendo sus dedos!, los sonidos vuelan como colibríes eléctricos, el corazón nos dice que la belleza de las notas aunque surgen del movimiento de las manos y los dedos, el manantial real también proviene del Corazón del Maestro y esa procedencia, hace que por simpatía, sienta el nuestro lo mismo.
¡Qué grande es el Arte!, cómo se ven compensadas tantas horas de incansable esfuerzo, la música bien trabajada, bien sentida, bien interpretada, nos recuerda, que estudiamos para sentir cuantas más veces mejor, esa alegría en nuestros corazones, la misma que de forma maravillosa, nos transmiten los... Grandes Maestros.
Disfrutad.
El profesor: Diego Fernández
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